Hoy tenemos un día soleado y me apetece ir a descubrir nuevos rincones de aquí y de allá, así que me pongo en plan y salgo tirando millas.
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Oviedo - Santillán
Salimos de Oviedo dirección a Arriondas, donde busco donde tomar algo y echar gasolina, pues no quiero que luego me pille el toro. Al no encontrar nada que me guste, continúo hasta Cangas de Onís donde rellenaré depósito.
Una vez seguro de no quedar tirado, me pongo en marcha por la carretera de Puerto Pontón. Voy avanzando hasta que veo al lado derecho de la carretera una panadería y se me ocurre para ver que puedo llevarme para hacer la media mañana.
El pueblo se llama Santillán y he pasado por delante un montón de veces, pero nunca había parado. Así que entro en la panadería que hacía las veces de tasca, pues había feligreses tomando el vino en unas mesas habilitadas, y le pregunto que tienen por allí. Me ofrece bollos preñados, y empanadas y muchas más cosas, pero me decanto por un par de porciones de empana de bonito, mi preferida en estos casos.
Compro también una botella de agua y me voy a ver donde puedo hacer el pinchoteo. Justo detrás del edificio de la panadería, hay un pequeño parque con unos bancos y espacio para dejar la moto, así que decidido allá voy.
Mientras pruebo la empana enfoco a mi derecha y puedo ver la entrada a un puente colgante que cruza el río Sella, parece que me está llamando poderosamente. Termino la porción de empanada y me lanzo a explorar a ver que encuentro por ahí.
Desfiladero los Beyos - Mirador de Sajambre
De nuevo en marcha, continúo por la N-625 dirección Riaño, la carretera poco a poco se empieza a estrechar y las montañas también se van acercando a ambos lados del asfalto, llegamos al Desfiladero de los Beyos. Buen asfalto y carretera revirada, que hay que recorrer con cuidado pues hay bastante roca caída de las paredes.
Un poco más adelante tomo un desvío para visitar un Mirador que tengo apuntado en mi rutómetro. Es el mirador de Vistalegre de Soto de Sajambre, un poco antes de llegar a Oseja de Sajambre.
Lástimas que las torres de alta tensión y los cableados estén por todos lados y fastidien las vistas tan chulas que hay.
Mirador y Puerto Panderrueda - Posada Valdeón - Puerto Pandetrave - Portilla de la Reina
Llego al fin a la cima del Puerto del Pontón y un poco más allá tomo el desvío hacia Caín y Posada de Valdeón. Siguiendo por esta carretera llego al destino que me parece más apropiado para tomarme el almuerzo de hoy.
El mirador de Panderrueda, ubicado en el puerto del mismo nombre. Una esplanada con unas mesas de pizarra y piedra, y con unas vistas brutales de los Picos de Europa en su máxima expresión.
Todo idílico hasta que llegó la excursión de turno y aquello se volvió un guirigay tremendo, pero bueno, el prado es de todos, es lo que hay.
Tras descansar un buen rato, continúo la marcha bajando hacia Posada de Valdeón, aquí giro a la derecha para seguir, cruzando el puerto de Pandetrave y luego bajar hacia Portilla de la Reina, donde me detengo a reponer líquidos.
Pto San Glorio - Potes - Mogrovejo
Seguimos la marcha por el valle de La Reina, por la N-621 que nos llevará hasta Potes, cruzando su fabuloso Puerto de San Glorio.
Hay que reconocer que Cantabria cuida mucho sus carreteras y es una gozada poder disfrutarlas. Voy bajando y el calor comienza a apretar de lo lindo, llego a los 28º que para ser octubre, ya está bien.
Una vez en Potes giro a la izquierda en dirección a Fuente De. Hoy no pasare por ahí , porque quiero desviarme un poco antes a conocer otro pueblo que se llama Mogrovejo. Un pueblo de interés turístico y con una torre de finales del siglo XIII, digno de visitar.
Al final no me puedo entretener mucho y tengo que marchar, pero queda pendiente volver y disfrutar de un paseo por este pueblo.
Retorno rápido
La vuelta la realizo por el camino más rápido, pero disfrutando del segundo desfiladero, en este caso el de La Hermida. Con bastante más tráfico y obras que en el anterior, lo que entorpece bastante el avance.
Pero bueno se disfruta igualmente el viaje. Es un clásico.
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